Ayer estaba siendo un día raro, así que decidí convertirlo en un buen día con un plan que NUNCA falla. Me fui a FNAC a buscar el último libro de George R. R. Martin, Danza de Dragones, pero estaba agotado y también en la editorial, así que supuse que tendría que esperar un montón de meses para tenerlo en mis manos como ya me pasó en otra ocasión con sus libros. Por suerte aun quedaban algunos ejemplares en la librería Cervantes, en Oviedo (a los interesados, daos prisa). Bien, ya tengo EL LIBRO, entretenimiento asegurado. Después pedí una pizza para llevar a casa y me puse Amelie. Fue como un buen filtro de cámara, el día se veía de otro color. No se que tiene esa película pero siempre me hace espabilar. Al final del día mis padres me invitaron a ir al cine y vimos La felicidad nunca viene sola, la última de Gad Elmaleh y Sophie Marceu. Con ese toque que tienen las películas francesas y un humor que de sencillo era desternillante, acabé por irme a dormir muy animada y con ganas de que llegase el día siguiente para hacer mil cosas que se me habían ido ocurriendo... :)
Espero que tengáis un buen día!!!
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